MAR ADENTRO

 He dejado muchos borradores, los últimos días no he escrito más que una simple frase, y que aun no logo recordar donde la escribí, a veces es tan duro salir de estos pequeños episodios de tristeza, es tan duro lidiar con la ausencia tuya y mía, y digo mía porque extraño quien era yo, extraño las noches cortas, extraño levantarme de golpe, extraño ver un amanecer, las noches de lectura y solo eso, mi taza de café vacía, la paz de un corazón reconstruido; desde tu llegada muchas manías y hábitos míos han cambiado, hoy me levanté tarde nuevamente, me parece imposible creer que un nuevo día ha llegado, amo las noches en las que despierto entre esas horas llenas de silencio, no hay mas que un aullido lejano, pero mi mente no deja de pensar y pensar, vuelvo a cerrar los ojos y nuevamente despierto, realmente duele saber que solo ha transcurrido una simple hora, quiero gritar, lloro imaginando que somos tú y yo, pero sé que jamas será un nosotros, que ese sueño solo existe aquí en esta habitación, y creo que a veces por eso quiero estar aquí, quiero escribir y decirte lo mucho que amo tu risa, la forma en que hablas, la manera tierna de mandar al mundo a la mierda, la menara en que eres tú, una manera extraña, tu misterio, tus ganas de hablar y las ganas de esconderte tras tú, tus días buenos, que aun no logro conocer, la estúpida manera en que lastimas la piel de tus dedos, cuando me ignoras por cualquier consejo estúpido que te doy, me gusta la manera en que esto pasa, en las noches que me regalas, y en las que simplemente no estás y esa manera tuya de ausentarte , amo la manera en que hago entenderme que no me importas, que este sueño durará no mas que algunas noches más, que llegará el día en que te perderé para siempre, cuando te enamores de alguien más y porque somos de clases diferentes; aunque siempre estaré agradecida por regalarme nuevamente este sentimiento, estas letras que aunque hubiera querido hablaran de mi, son de ti y para ti, aunque jamás lo sabrás. 

Las salidas contigo, cuando permanecíamos sentados hablando de lo mierda que es el mundo,cuando solo tu hablabas y yo te escuchaba, cuando dijiste que el suicidio podría ser a los 28, solos ahí mencionaste sin querer lo triste que estabas de tu simple existencia, después contabas esas pequeñas anécdotas tuyas, reías y yo guardaba cada gesto tuyo, tus dientes chuecos que forman la sonrisa más estúpidamente linda, la manera tan dulce de insultarme, pocos momentos pero suficientes para sentir este océano de emociones, que probablemente tenga una y mil tormentas, los huracanes ya los he vivido, así que esperaré a que el viento se lleve estos recuerdos, que las olas grandes ahoguen este sentimiento, que la lluvia escampe, quiero salir y sentir el leve rocío de las últimas gotas y no ver más que el cielo reflejado en las aguas con su movimiento tranquilo de estar mar adentro. 

Te quiere, S.



LILA USHUAIA

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